Poemas de Sangre, Amor y Sombras
(Poemario compuesto de 48 poemas)
Sinopsis
El aire, ese color del cielo clavado en la mirada, gente pasando, mi amor por tí,
el miedo, la rabia y los complejos, todo lo que no me deja avanzar,
lo que veo y lo que no, la poesía son conexiones,
y éstas son las mías.
Extracto
...
Se va la fuerza.
Se va mi sangre.
Mis pies gotean,
todo ese agua
que mi cuerpo ya no sostiene.
Pienso hundirme.
No me busquéis.
Volveré sola,
limpia y vacía.
Con la sangre seca
y los pies en llamas.
...
No tengo absolutamente nada que ofrecer.
No tengo ojos claros
ni un apellido fácil
mi culo es gordo
y mis ojos están tan hundidos
como el Dios en el que crees.
Soy de padres pobres
no tengo dinero,
y lo único que sé
es que no tengo
absolutamente nada
nada
nada que ofrecer.
Más que a mi misma
más que mí amor
mi criterio
lágrimas,
histeria y emoción.
Más que las manos a la tierra
y el cuerpo al sexo
la fuerza (que siempre falta).
Incluso
algunas noches
puedo dar el alma
apagar el reloj
y dar todo lo sobrante
a las causas más sentidas.
¿Será suficiente?
Para los amantes absurdos
Para los maestros,
que me enseñaron
y la familia segunda.
¿Será suficiente?
Para todos aquellos que creían en mis ojos marrones,
mis curvas y mi memoria,
todos aquellos que creían en mi nombre.
Todos aquellos,
los que no me dejaban salir a jugar fuera.
¿Será suficiente para ellos?
¿El alma,
el tiempo
y el sentimiento?
¿Podrán aguantar el peso de mi fracaso,
en sus ojos claros,
sus cuerpos esbeltos,
y todos sus conocimientos?
Definitivamente,
ya no me importa.
Sólo debes saber,
que no tengo absolutamente nada
nada
nada que ofrecer.
...
Tu olor,
dulce y ácido.
Ese aceite amargo y viejo
tan característico,
me lleva justo al lado del brasero,
me hunde el pelo en la bañera,
me enjabona casi tan bien como lo hacías tu
en esas tardes de lunes fríos y cansados para todas.
No estoy en cuerpo, porque no sé estar,
no estoy en ímpetu, porque no soy tanto,
pero aún así,
estoy para ti,
para siempre,
pensando y recordando.
Tu hija, mi madre,
tu trabajo y fuerza,
que no cabe entero de orgullo en mi pecho.
Porque qué pensaría la americana,
si supiera
que a sangre,
corazón
y puño,
no nos gana nadie.
Por eso,
por el brasero caliente,
los garbanzos cocidos
y mi pelo limpio,
pienso cuidar en alma,
amor,
vejez,
libertad
y miedo,
a todos los amores de tu vida.
...
Llórame de una vez,
de la manera que quieras.
Llórame desde dentro
en la cama
el parque
o el coche.
Llórame durante siempre
o solo un rato.
En silencio,
o llórame histérica.
Llórame el corazón
la boca y el pecho.
Llórame en calor,
y en el más duro frío de invierno.
Pero llórame a mí,
Y a nadie más.
...
Las sombras
aquellas que me llevaron a ver más allá,
aquellas por las que hoy siento y lamento.
Las sombras, aquellas que me llevaron a mirar hacia atrás,
aquellas por las que hoy miento y sufro.
Esas sombras,
bellas,
desnudas,
sombrías,
e impermeables.
Esas sombras,
son mujeres.
Sobre sus caballos negros,
cabalgan lentas
bandera izada.
Ven vuestro reino a lo lejos.
Estáis tranquilos,
bebiendo vino y jugando a cartas.
Las sombras,
desnudas,
bellas
y sombrías,
caerán del cielo encima vuestro
Esas sombras,
sobre sus caballos,
ondeando su bandera oscura en el cielo gris.
Venimos a quedarnos con todo.
Somos gordas y negras,
peludas y sucias.
Y venimos,
a quedarnos con todo.
...